La industria de los semiconductores o como comúnmente los llamamos, los chips, está viviendo una situación de crisis a nivel mundial debido a la falta de suministro. Dicha escasez repercutirá principalmente a diferentes industrias, como las del automóvil, los electrodomésticos y el IT empresarial, que podría acompañarle una subida de precios que afectaría a todos los implicados.
Aproximación al mercado de los semiconductores
Los semiconductores son un elemento imprescindible en la electrónica moderna, siendo un componente importante en muchos dispositivos electrónicos de uso común, incluidos teléfonos inteligentes, tabletas y ordenadores. Esencialmente todos los dispositivos modernos de los que muchos de nosotros nos hemos vuelto tan dependientes en la vida cotidiana.
Evolución Ingresos de la Industria global de semiconductores (2016-2021)
En 2021, se espera que las ventas de semiconductores alcancen los 488.3 millones de dólares.
Por grandes áreas, el continente asiático es el claro dominador representando casi el 70% de las ventas a nivel mundial. China representó la mayor parte de las ventas con 151 mil millones de dólares y el resto de la región de Asia Pacífico (excepto Japón) registró 118,2 mil millones. Las ventas de semiconductores en América ascendieron a 94,1 mil millones de dólares estadounidenses.
Cuota global de ventas de semiconductores por región en 2020
En cuanto a tipo de aplicación, los semiconductores de memoria, las unidades de procesamiento de gráficos (GPU) y los chips 5G son los componentes que han lideraron el crecimiento del mercado de semiconductores en 2020, gracias al impulso de la demanda del consumidor final, con ordenadores, ultra móviles y teléfonos 5G.
Previsión del mercado global de semiconductores por aplicación para 2024
Finalmente, en cuanto a los proveedores líderes, Intel mantuvo su posición como el proveedor mundial de semiconductores número uno por ingresos en 2020, seguido por Samsung Electronics, SK hynix y Micron.
Cuota de mercado global de proveedores de semiconductores en 2020
Factores de la crisis
Desajuste entre oferta y demanda. La producción no puede seguir el ritmo de una demanda, debido a su rigidez, que se ha visto incrementada por el mayor uso de los chips en dispositivos de consumo.
El mercado, que ya estaba sometido a fuertes convulsiones debido a que la producción no podía seguir el ritmo de la demanda, vivió una interrupción temporal del suministro de chips debido al cierre de la mayoría de las fábricas a consecuencia de la pandemia.
Durante este periodo, aumentaba la demanda de nuevos dispositivos móviles, PC y actualizaciones de centros de datos en respuesta a la necesidad de realizar gran número de trabajos en remoto, a la enseñanza y el aprendizaje en casa y otras tendencias forzadas por la necesidad para una gran mayoría de la población mundial de quedarnos en nuestros hogares. Además, se produjo un trasvase del gasto de los consumidores, los cuales no pudieron gastar en servicios como restaurantes y viajes y que sí destinaron el gasto hacia productos electrónicos.
Y nos hacemos la gran pregunta, ¿por qué no se invierte para conseguir una mayor producción?
No es que las grandes compañías del sector no sigan invirtiendo para lograr una mayor oferta, sí siguen invirtiendo, pero estamos hablando de una industria muy intensiva en capital, o sea, de maquinaria, que requiere de grandes inversiones y de personal cualificado, lo que hace que la inversión no dé sus frutos de un día para otro. En otras palabras, abrir una nueva fábrica de semiconductores puede llevar entre 18 meses y tres años.
En definitiva, como principales factores de la crisis podemos señalar al aumento repentino de la demanda, la reducción drástica de la producción por la pandemia y a la falta de previsión de stocks.
¿Cuándo se normalizará la situación?
La solución al desabastecimiento de microprocesadores no va a ser inminente. Lo que parecía un desajuste temporal se ha convertido en un gran problema de escala mundial. La demanda no para de crecer y el crecimiento de la industria no se verá reflejado en el corto plazo. Por tanto, habrá problemas en la cadena de suministro y la producción de aparatos electrónicos y cualquier equipo conectado estará limitada.
Los grandes fabricantes como TSMC, Samsung, e Intel, están realizando grandes inversiones, pero ampliar una fábrica de chips no es tan sencillo como abrir un bar o una peluquería, producir la maquinaría con la que trabajan lleva su tiempo.
“Aunque la industria ha tomado medidas para hacer frente a las limitaciones a corto plazo, todavía podría llevar un par de años que el ecosistema se ocupe de la falta de capacidad de fundición, sustratos y componentes”, en palabras de Pat Gelsinger, Consejero Delegado de Intel.
Sectores afectados
La escasez de semiconductores está afectando a buena parte de la industria, pero muy especialmente a la automoción: la pandemia provocó una drástica caída de la demanda de automóviles, paralizando el sector y dejando de consumir chips, unos componentes que sirvieron para surtir la pujante industria tecnológica.
Con la recuperación, el sector automovilístico necesita nuevamente esos circuitos integrados y se encuentran con que no hay stock, ya que los productores destinan estas piezas a sectores más rentables, como los fabricantes de teléfonos móviles, que utilizan semiconductores “de vanguardia”, de mayor valor añadido y, por lo tanto, más caros.
Entre otros sectores afectados tenemos el de los Camiones y vehículos industriales, con grandes retrasos que desplazan la demanda hacia el mercado de ocasión, el de los Electrodomésticos, con reducciones en la fabricación y, por consiguiente, grandes pérdidas en ventas, el sector del videojuego, el de las telecomunicaciones y el sector tecnológico en general.
¿Cómo puede la industria hacer frente a la crisis?
Desde el punto de vista de mercado y de acuerdo con los analistas de Gartner, la industria de fabricación de semiconductores debe de tomar las siguientes medidas para reducir el riesgo y la pérdida de ingresos, de acuerdo con:
- Mejorar la visibilidad de la cadena de suministro. Será fundamental prever las limitaciones y los cuellos de botella que se puedan producir, así como poder calcular cuándo mejorará la situación para poder reaccionar, yendo más allá del proveedor al nivel de silicio.
- Modelo complementario de garantía de suministro. Aquellas empresas que necesitan componentes críticos y de menor tamaño deben buscar acuerdos con compañías similares para negociar con las fábricas de chips en mejores condiciones.
- Seguimiento de los principales indicadores. Conocer una combinación de parámetros relevantes puede ayudar a que las organizaciones tengan más visibilidad y puedan tomar decisiones más acertadas.
- Diversificar proveedores. Requiere trabajo e inversión, pero ayudaría mucho a reducir el riesgo.
¿Cómo afecta al mercado IT?
La escasez de chips afecta directamente al mundo IT, ya que toda la estructura de hardware precisa de estos componentes.
Otro factor que se ve afectado ante la reducción de la oferta y aumento de la demanda es el precio. Según Thomas Sweet, director financiero de Dell, el aumento de los costes para obtener los semiconductores tendrá un impacto negativo en los ingresos y, por consiguiente, también en una subida de precios de los dispositivos.
Ante esta situación, algunas compañías del sector, como Apple, Google, Microsoft e Intel se han unido para presionar al gobierno de los Estados Unidos y así conseguir financiamiento para la manufactura de los insumos.
Incluso han fundado la Semiconductors in America Coalition, donde también participa Amazon Web Services, a través de la cual han pedido a los legisladores de ese país que proporcionen fondos para la Ley CHIPS for America.
Por lo tanto, desde un punto de vista de empresa, parece que no sea un buen momento para realizar inversiones de infraestructura física.
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